Millonaria inversión en el recambio de una bomba de agua, y advertencia municipal por morosidad en servicios sanitarios
La Secretaría de Servicios Públicos informó que se completaron las tareas de recambio de la bomba de agua en el barrio Escorial, una pieza de infraestructura crítica que garantiza el abastecimiento del recurso hídrico no solo a ese vecindario, sino también a los sectores de Polo, Villa Marced y Aromitos.
La intervención técnica se llevó a cabo en un contexto financiero complejo para el área que conduce Adrián Devito. Según datos oficiales difundidos por el Municipio a través de sus redes, la recaudación notablemente baja: en la actualidad, apenas el 40% de los vecinos se encuentra al día con el pago de sus tasas municipales.
En términos nominales, lo recaudado por el municipio en dicho sector no supera los 500.000 pesos mensuales, una cifra que contrasta con el valor de mercado de la nueva bomba instalada, la cual tuvo un costo de 4.000.000 de pesos.
"El desfasaje es evidente. Además de la inversión inicial para la compra del equipo, el mantenimiento anual de este sistema de bombeo ronda los 30.000.000 de pesos, un costo que el Estado municipal absorbe para que el servicio esencial no se interrumpa", indicaron fuentes del área económica local.
Desde la gestión municipal recalcaron que, si bien se prioriza la prestación de servicios básicos independientemente de los índices de cobrabilidad, resulta fundamental el compromiso de la comunidad para sostener el sistema.
"Seguimos trabajando para garantizar servicios esenciales, pero es necesario destacar la importancia del cumplimiento ciudadano. El esfuerzo de quienes pagan permite que estas obras lleguen, pero el sostenimiento en el tiempo requiere que todos los beneficiarios asuman su responsabilidad tributaria", concluyeron desde el Ejecutivo.
