Con la presencia de familiares y amigos, se realizó un emotivo homenaje al destacado músico, cantautor y gestor cultural Fabián Miranda en el Museo Provincial Casa Evita de la ciudad de Los Toldos. El encuentro, organizado por el mencionado museo y dependiente del Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires, tuvo lugar el sábado 2 de agosto y sirvió para recordar al artista fallecido el 24 de febrero del corriente año.
Como parte del tributo, se impuso el nombre del artista al escenario del Auditorio del espacio cultural, que ahora se llamará "Escenario Fabián Miranda". La jornada contó con la participación de músicos de distintos géneros, incluyendo a Jimena y Mercedes Miranda, quienes estuvieron acompañadas en la guitarra por Tito Videla,
Una vida dedicada al arte y la formación cultural
Fabián Miranda, nacido en Junín el 25 de marzo de 1960 y con fuertes raíces en la Región, fue un hombre de grandes valores, artista, músico, arreglador coral y docente, a quien se recordó como un "sembrador de música popular que trascendió el tiempo y las modas".
Su vínculo con la música comenzó desde muy temprana edad y se consolidó con una sólida formación en el Conservatorio de Junín y con maestros como Omar Decarre, Roberto Calvo, Diego Schissi y Stella Crisci.
A lo largo de su carrera, Miranda dejó una huella imborrable. Fue cantante en la película “Perón, sinfonía del sentimiento” de Leonardo Favio y solista de la Misa Criolla, auspiciada por el Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires y dirigida por el maestro Damián Sánchez.
Como arreglador y director, estuvo al frente del Grupo Vocal Origen, agrupación ganadora del Pre Cosquín en 2008, y que cuenta con dos discos grabados. También dirigió el Coro Municipal de Teodelina, el Coro Polifónico Municipal de General Viamonte y el Grupo Vocal Cantares de San Pedro, entre otros. Su compromiso con la cultura popular lo llevó a ser jurado en festivales de renombre como Pre Cosquín y Pre Baradero.
Entre sus múltiples distinciones, se destacan: Revelación de Baradero en 1995, finalista en Cosquín en 1987 y ganador del Premio DIDEBA al mejor disco solista en 2007.
Además de su carrera artística, Miranda fue un incansable formador, acompañando a generaciones de jóvenes en su camino musical. En San Pedro, donde estuvo radicado, se desempeñó como profesor de Música Popular en el Centro de Formación Profesional. Su legado es tan significativo que la Casa de la Cultura del Sindicato de Empleados de Comercio de esa ciudad hoy lleva su nombre.