Mapa de arsénico en el agua: San Pedro en alerta moderado

La presencia natural de arsénico en el agua subterránea continúa siendo una preocupación sanitaria en vastas zonas de la provincia de Buenos Aires. Si bien muchos distritos registran niveles críticos, en el partido de San Pedro se mantiene la alerta moderada, lo que exige un monitoreo constante para garantizar la salud de sus habitantes. Según el último relevamiento del "Mapa de Arsénico en Argentina" elaborado por el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), San Pedro se ubica en la denominada "franja amarilla" , con concentraciones de arsénico que oscilan entre 10 y 50 microgramos por litro (partes por billón) . Este rango, aunque se encuentra dentro del límite máximo permitido por el Código Alimentario Argentino (50 µg/L), supera la recomendación de 10 µg/L de la Organización Mundial de la Salud (OMS) .

Geraldine Peronace: "Hay una generación un tanto fóbica a crecer"

La psiquiatra Geraldine Peronace, especialista en adicciones, brindó este sábado una interesante charla en el Club Náutico, sobre "Tiempo moderno, jóvenes y consumo".
La especialista habló para un auditorio compuesto por deportistas de la entidad, padres, directivos y profesores, en base a su experiencia en instituciones, colegios y hasta boliches bailables.

En diálogo con "Noticias San Pedro" sostuvo: "Esta charla está orientada al alcohol y el cannabis que es donde mayor problemática tenemos con nuestros jóvenes. A partir de tanta aceptación y complacencia de parte de los padres y de la sociedad, se convirtió en un grave problema de salud pública. Tenemos que ajustar un par de clavijas y dar lineamientos para que los papás puedan tomar conciencia".
Peronace señala que los padres pasaron "de un extremo casi represivo a una permisividad total" y sostiene: "Desde alguna perspectiva vemos la situación hablando de una cuestión un tanto fóbica a crecer, vamos a llamarlo así, de parte de esta generación. Y esto lo vemos como síntoma en lo más pequeños. Vamos viendo de generación en generación esta situación. Los chicos salen de estos papás".
El objetivo es quebrar esa lógica: "Tenemos causa - consecuencia. Que cada uno pueda tomar el lugar que le corresponde, no estar en los cuarenta y en los veinte, todo al mismo tiempo. La verticalidad se va perdiendo, y no hay papás ni mamás, están todos fraternizados en la misma frecuencia. Madre hija y abuela visten igual. Capaz aparece muy tonto o frívolo, pero sabemos cómo está constituido el siquismo. Hay todo un mercado que tiende a un determinado lugar de homogeinización y de estar todos en la misma frecuencia".
Para Peronace, la verticalidad es parte de la condición humana: "Siempre, desde que el mundo es mundo, tiene que haber cabezas. Las familias están acéfalas, y se espera que el Estado, los colegios o los docentes ocupen ese lugar. Por más buena predisposición que tengan, ninguno puede hacer el trabajo de papá o mamá".
En relación, específicamente, a la problemática de las adicciones y su influencia en estos tiempos, agregó: "Tenemos consumos abusivos. No es el mayor problema la adicción. La mayoría de los muertos son los jóvenes que usan y abusan, y que pasan desapercibidos. El adicto es reconocido como enfermedad, tiene tratamiento. Pero el problema principal es el que tiene uso y abuso".