Mientras el sol se hunde en el horizonte, la ciudad cambia de ritmo y marca otro comienzo. Las luces se encienden, las terrazas se llenan y las calles empiezan a contar otra historia, diferente a la de las playas y las olas. La noche marplatense tiene propuestas para todos: desde quienes buscan música hasta quienes prefieren una caminata tranquila frente al mar.
Avenida Alem y la movida joven
La Avenida Alem se transformó en el epicentro de la noche joven. Bares y boliches uno al lado del otro: Tiki Bar (Alem 3690), Torombolo (Alem 3582), entre otras opciones, son algunos de los nombres que aparecen cuando se habla de salir en Mar del Plata. La zona se llena especialmente los fines de semana, cuando locales y turistas se mezclan en una movida que arranca temprano y termina al amanecer.
El Boliche Bruto, ubicado en pleno centro de Playa Grande, ofrece dos pistas de baile y tiene la particularidad de funcionar también como restaurante. Está abierto de día, pero se transforma cuando cae la noche. Quba, otro de los clásicos frente al mar, mantiene su tradición de los "queves", ese día en que cortar la semana de forma distinta se convirtió en costumbre entre los más jóvenes.
Si estás pensando organizar una escapada para aprovechar la movida nocturna de la ciudad, conseguir micros a Mar del Plata es bastante directo y sencillo desde cualquier provincia argentina.
Cerveza artesanal: un clásico que se renovó
Por algo Mar del Plata está caracterizada por ser pionera en la industria de la cervecería artesanal. Los barrios de Güemes, Alem y Constitución concentran cervecerías que ofrecen desde estilos clásicos hasta cervezas de pizarrón, esas canillas rotativas con recetas exclusivas que cambian según la temporada. Antares, con dos locales en la ciudad (Córdoba 3025 y Bernardo de Irigoyen 3851), es un punto de encuentro inevitable. Su happy hour entre las 18 y las 21 horas permite probar distintos estilos mientras el día todavía no termina del todo.
Otras opciones como Cheverry —empresa familiar con cervezas premiadas—, La Paloma Brewing y Alarde completan el mapa cervecero. Cada una con su propuesta, pero todas compartiendo esa idea de que la cerveza artesanal se disfruta mejor acompañada de buena comida: papas, picadas, pizzas o los menús que maridan específicamente con cada estilo.
Tragos de autor y gin artesanal
Mar del Plata empezó a destacarse también por su producción de gin artesanal. Cerca de una veintena de destilerías locales elaboran gin que se sirve en bares especializados. La llamada "Ruta del Gin" invita a probar distintas versiones de esta bebida que se volvió protagonista en la coctelería marplatense. Muchos de estos gins se consiguen solo en la ciudad, lo que los convierte en un souvenir diferente para quienes quieren llevarse algo de la noche marplatense de vuelta a casa.
After beach y música frente al mar
Los after beach permiten estirar la jornada de playa sin cortar del todo con el día. Espacios como Samsara Beach, en las Playas del Sur, organizan fiestas con música electrónica que arrancan al atardecer y se extienden hasta la noche. La ventaja de estos lugares es que no hace falta esperar hasta la una de la mañana para empezar a disfrutar: el sol todavía está cayendo y la música ya suena.
El Balneario 8 en Playa Grande es otro de los puntos donde el after se convierte en plan. Con terraza frente a la escollera, combina esa onda surfer con música que va cambiando según avanza la noche. Lo mismo pasa con lugares como Thunder, uno de los bares más nuevos que sumó opciones a la zona de Alem.
