La medida de fuerza forma parte de un plan de lucha que incluye, además del paro, movilizaciones, asambleas y cortes de rutas en todo el territorio nacional. No se descarta, incluso, la posibilidad de un paro general para las próximas semanas.
El reclamo incluye "un aumento de emergencia para todas y todos los trabajadores formales e informales, activos y jubilados; salario universal para terminar con el hambre y la pobreza, y exigir un cambio de rumbo en la política económica para dejar de estar monitoreados por el Fondo Monetario Internacional".
Si bien ATE de la provincia de Buenos Aires decidió llevar adelante la jornada solo con movilizaciones (sin paro), algunos afiliados decidieron adherirse a la medida nacional, entre ellos auxiliares de la educación. Por tal motivo, en algunos edificios escolares no estarán garantizadas las condiciones de higiene y no podrán dictarse clases. Es el caso, por ejemplo, del turno mañana de la Escuela Normal (por la tarde, la actividad se reanudará con normalidad) o la Escuela 6, de acuerdo a lo reportado por padres de los cursos afectados.
