El servicio, que incluía mamografías, estaba tercerizado, pero el concesionario anterior se llevó sus equipos, en medio de un conflicto por el cobro de las prestaciones que ahora quedará en manos de la Justicia.
Por tal motivo, el directorio de la institución sanitaria decidió reiniciar la tarea con equipamiento propio.
"En realidad el grupo de personas que prestaban el servicio tenían una deuda con el sanatorio y en medio de ese conflicto se fueron y se llevaron el equipamiento" confirmó Iván Groppo, presidente del Consejo de Administración, a "Equipo de Radio".
Ante ese panorama, la institución debió realizar una inversión de urgencia: "En una tarde-noche se fueron, llevándose los equipos y dejándonos sin servicio. Hay una parte del equipamiento que era del sanatorio pero no teníamos digitalizador, que es la inversión que hicimos ahora, de arriba de 5 millones de pesos" indicó Groppo.
El reclamo por la deuda, de alrededor de 700 mil pesos, y la interrupción del servicio sin previo aviso, llegó a la Justicia. "Hicimos una denuncia que recayó en la Fiscalía del Dr. Manso (UFI 5) y ahora esperaremos por los próximos pasos" explicó.
