Allanamiento y secuestro de arma de fuego por denuncia de amenazas de muerte

Efectivos policiales de La Tosquera y Río Tala llevaron a cabo una diligencia judicial en el marco de una investigación por amenazas. Se incautó una escopeta calibre 16 en el domicilio del imputado, quien no se encontraba en el lugar. ​Personal del Destacamento La Tosquera, en colaboración con el Destacamento Río Tala, cumplimentó ayer una orden de allanamiento librada por el Juzgado de Garantías Nro. 01 del Departamento Judicial San Nicolás. ​La medida se realizó en el marco de una causa iniciada el pasado 30 de octubre, a raíz de la denuncia de un hombre de 49 años que manifestó haber recibido amenazas de muerte. ​El allanamiento tuvo lugar en un domicilio ubicado en la calle bajada basural S/N, Cuartel 3° de La Tosquera. Al llegar al lugar, el personal policial fue atendido por la pareja del imputado, una mujer de 29 años, ya que el principal investigado no se encontraba en la vivienda. ​La diligencia judicial arrojó resultado positivo, procediéndose al secuestro de una ...

Sualdea: "Me miré en el espejo y no me reconocí el rostro"

El Dr. Javier Sualdea, Director del Hospital Subzonal "Dr. Emilio Ruffa", habló sobre su experiencia como paciente Covid, que lo tuvo más de dos semanas internado. 

"Lo veía como una posibilidad cierta pero no concreta, uno podía estar con un cuadro leve en aislamiento por la exposición, pero no que iba a terminar con una neumonía, 16 días en una sala de aislamiento" explicó el facultativo. "Es una experiencia inolvidable, pero nada grata. Hay gente que ha estado peor que yo, aunque creo que ninguno de los agentes sanitarios. El aislamiento te destruye psicológicamente. No solo es lo físico" expresó, en declaraciones al programa "Mitades" de La Radio 92.3. 

Además de la situación física, también el impacto fue mental: "Me miré en el espejo y no me reconocí el rostro. Yo llevaba casi una semana de internación y me habían terminado de pasar plasma de convaleciente. Ahí caí en donde estaba. Me dije en un momento que si no zafaba con el plasma me podía morir. Y a partir de ahí empecé a recibir apoyo psicológico por videoconferencia, fui medicado, mejoré con el plasma con un tratamiento integral. De ahí fueron diez días más. Ingresé el 3 de agosto, el plasma me lo pasaron el domingo 9 y estuve hasta el 18 internado". 

El tratamiento comenzó a dar resultado, aunque aún se encuentra convaleciente: "Desde el punto de vista físico con el plasma, recuerdo que estaba con máscara con oxígeno, no respirador, y saturaba 86%, 24 horas después saturaba 93 en las mismas condiciones. Todavía necesitaba oxígeno pero me sentía mejor. En los tres primeros días de internación prácticamente no comí. No tenía hambre. Eso hace que empiece a perder masa muscular y peso. Me mantenía a través del celular con cientos de mensajes, y no quería prender el televisor, para no ver noticias de Covid. Quería descansar. Todos los agentes sanitarios estamos sometidos a un estrés terrible desde hace cinco meses. Todo esto tiene que ver con el sistema inmunológico que hace que baje las defensas. Llegaba al baño y tenía que quedarme un rato. Quería cepillarme los dientes y me agitaba. Lo que me puso de cara a la realidad fue cuando me miré el rostro y no me reconocí en el espejo". 

Sualdea también dirigió un mensaje a quienes piensan que se trata de un cuadro leve: "No tienen idea de los dolores musculares que se sienten, de la fiebre. Es una batalla que se gana con soldados, y nos estamos quedando sin soldados. Lo que hay que hacer es dejar de mirarse el ombligo y mirarse al espejo". 

Además, el funcionario fue pesimista con relación al futuro epidemiológico del país: "Lo que se viene es peor, porque en verano, con el calor, va a haber una epidemia de dengue. Y van a morir como moscas. Los médicos están agotados, se cortaron las licencias, las vacaciones, y estamos con una contingencia y viene la otra". 

También hizo referencia a los reclamos contra las medidas preventivas: "Yo entiendo que todo el mundo tiene derecho a reclamo, pero un poco más de respeto por los muertos, que son 60 agentes sanitarios.  Yo tirado en una cama el 17 de agosto y veía gente marchando en el Obelisco, y no sabés si son hdp, brutos, ignorantes o perversos que no les importa nada. Muchos de los que van a la marcha anticuarentena, después cayeron con Covid. Nadie les niega la atención, pero ni siquiera agradecen".