Muestra fotográfica del Programa Envión en La Tosquera

 Jóvenes del Programa Envión de La Tosquera inauguraron una muestra fotográfica en el Centro Municipal Marcelina Suárez, donde compartieron sus perspectivas sobre el barrio y la vida cotidiana. La exposición, que busca fomentar la creatividad y la inclusión, refleja la mirada particular de cada participante sobre su entorno. La iniciativa permitió a los jóvenes expresar, a través de la fotografía, cómo perciben su comunidad, destacando la belleza de lo cotidiano y creando un espacio de encuentro con el arte. El proyecto contribuye al fortalecimiento de los vínculos comunitarios entre los participantes.

Gabriela López recibió el beneficio de prisión domiciliaria y está en Santa Lucía

La Justicia resolvió en las últimas horas hacer lugar al pedido formulado por la defensora oficial Mariana Garro y otorgar el beneficio de prisión domiciliaria para Gabriela López, quien confesó haber matado a su hijo de tres días en octubre de 2009.

Su hermano, Walter, confirmó a través de APA Radio San Pedro que Gabriela llegó a la casa de los padres, en el radio urbano de la localidad de Santa Lucía, poco después de las 12. La mujer estaba internada en una clínica psiquiátrica de Pergamino, adonde fue derivada desde el pabellón femenino de la cárcel de Los Hornos.

El hermano informó que la procesada dejó de tener cobertura de su obra social y no estaban en condiciones de seguir pagando el costo del centro asistencial privado. Mientas permanezca en la casa de los padres seguirán rigiendo las condiciones de detención, y permanecerá bajo tratamiento médico psiquiátrico, con medicamentos y un seguimiento de profesionales.
López, de 39 años, había aparecido en octubre del año pasado en distintos medios señalando que había entregado a su hijo recién nacido a una mujer “que no conocía porque la ví dos veces: cuando la conocí en el Instituto Sarmiento y cuando le di el bebé”. Incluso sostuvo que la entrega se efectuó en la esquina de la clínica San Martín, por calle Gomendio, y describió a la mujer como “delgada y bastante morocha”.
Finalmente, con el paso de los días, López no pudo sostener la mentira y confesó que mató a su bebé en la habitación de la clínica, y trasladó el cuerpo en un bolso mientras viajó en colectivo a Santa Lucía. Ocultó el homicidio a su familia, y aprovechando la oscuridad de la noche enterró al pequeño en un monte cercano a la casa en donde vivía junto a sus padres.
El cadáver fue encontrado siguiendo los datos aportados por la detenida, quien confesó ante su abogada y luego ratificó sus dichos a la comisaría. El hallazgo se produjo a pocos metros de la casa en donde vivía López junto a su familia, en la estancia “El Descanso” ubicada a pocos kilómetros del paraje del mismo nombre.