Autoridades retomaron las gestiones para la aprobación del Parque Agroindustrial

El Intendente Cecilio Salazar, acompañado por el Jefe de Gabinete Alfredo Carrasco y el secretario de Producción, Industria y Comercio,  Ariel Álvarez, se reunió con la Subsecretaria de Industria y Pymes, Mariela Bembi, para actualizar el progreso del proyecto del Parque Agroindustrial de San Pedro.  Juntos, repasaron el estado de la documentación necesaria para la aprobación final del proyecto, que se encuentra en la última instancia para lograr la certificación definitiva del predio como parque agroindustrial.

"Me veo obligada a largar los perros del refugio a la calle"

Cecilia Tarsetti, responsable del Refugio San Pedro, confirmó lo adelantado en un posteo realizado en las redes sociales: por razones económicas, parte de los animales volverán a la calle.
"Lamentablemente, y por causas de fuerza mayor, me veo obligada a largar los perros del refugio a la calle. Castrados y con su vacuna... eso si" aclaró la proteccionista.

Tarsetti trabaja hoy en el Departamento Canino del Municipio, en una oficina contigua al refugio. Sin embargo, todo su sueldo fue destinado, como en meses anteriores, al mantenimiento del lugar. "No hay presupuesto para solventar tanto gasto. Yo puse mi mísero aguinaldo y mi pobre sueldo pero nada alcanza" explicó.
En la misma publicación, agregó: "Si ven nuevos perritos en las calles, seguro son los refugiados que recuperaron su libertad. Me quedo con los viejos, ciegos y cachorros enfermos". Además, pidió que quienes los vean por las calles, les ofrezcan agua y algo para comer.
En una entrevista que será publicada en "Somos Noticias" precisó que "no es vida para los animales que estén encerrados en un canil de 4x4 con calor, que se inundan cuando llueven, y eso me pone mal, y me estresa y me angustia..."
El primero de los alrededor de 60 animales que están ante la disyuntiva de encontrar un nuevo hogar o ir a la calle ya fue entregado a su antigua tenedora. Al menos otros 100 perros seguirán en el refugio. Aún con esa reducción, nadie puede asegurar de dónde saldrá el dinero para pagar los sueldos de las dos personas que ayudan a Tarsetti con la limpieza y la alimentación, las atenciones de los veterinarios, el alimento y los insumos para la mantención.