Choque entre una camioneta y un automóvil en la Ruta 9

Foto FM Tiempo y Th Producciones Un accidente de tránsito, que involucró a una camioneta perteneciente a una empresa sampedrina y un automóvil, tuvo lugar esta mañana en el kilómetro 130 del carril Rosario - Buenos Aires de la Ruta 9.  Dos personas fueron trasladadas en una ambulancia al Hospital "Lino Piñeiro" de la ciudad de Baradero. Una de ellas es el conductor . 

Testimonios e imágenes de la jornada en defensa de las carreras en el galgódromo de ruta 1001

La jornada desarrollada hoy en el galgódromo de Ruta 1001 reunió a criadores y amantes de la actividad de gran parte de la provincia de Buenos Aires. 
Héctor Pellini, de Ramallo, participa de carreras desde el año 1983. En diálogo con “Noticias San Pedro” y “Telenoticias”, el “galguero” salió al cruce de las acusaciones realizadas por las organizaciones que piden la prohibición de la actividad: “Uno escucha muchas versiones de que se usan los perros y después se abandonan. Traigo una perra (“Mía”) que tiene cincuenta carreras corridas, trece años de vida y la traje para que la vieran. Jamás se me cruza por la cabeza abandonar un galgo”. 

Si bien reconoció que dentro de la actividad puede haber gente que maltrate o dope a los animales, entiende que “toda esta movida agranda mucho el tema” y que “puede haber algo como hay en otras actividades, pero me duele que nos juzguen cuando cuidamos tanto a los animales”. 
Pascual Domingo Peñalba, de San Andrés de Giles, dueño de “Único” al que llevó hasta el galgódromo, agregó: “Siempre vine a correr, me gusta el deporte de los perros y es algo en familia, con chicos, con mujeres. No sé qué hay contra los galgueros. Duele lo que están haciendo, porque hay tantas cosas malas y nos sacuden a nosotros. No sé de dónde sacaron que los abandonamos. Uno lo cuida como reliquia. Nunca lo voy a abandonar. El que hace eso no es galguero, puede haber de 1.000, 10. El perro es un animal como el caballo, de lo más fiel”. 

Por su parte, Roberto Rivadeneira, de Baradero, también habló sobre las acusaciones de dopaje: “A los perros les damos remedios, pero no para matarlos, sino para cuidarlos. De los años que ando en este tema nunca vi que se muriera un perro como consecuencia de la actividad. Los mismos remedios que se les da a los caballos, se les dan a los perros, en menos cantidad. Si quieren suspender la carrera de galgos tienen que suspender las carreras de caballos. Pero no hay como el galguero, que cuida al perro como nadie. Puede que alguno no lo cuide, pero el 90 % los cuida a los perros”. 

En un aparte con este medio, mientras se desarrollaba una especie de “radio abierta” con testimonios de los presentes a través del sistema de sonido del galgódromo, un ex combatiente de Malvinas radicado en Campana resaltó que él y muchos de sus compañeros utilizan esta actividad como terapia. “Trabajamos de lunes a sábados. En nuestros momentos libres cuidamos a los perros y los domingos tenemos las carreras para distraernos. No hay que olvidarse que murieron más soldados por suicidios después de la guerra que aquellos que dejaron la vida en las islas” recordó. 

Documental 
Un grupo de alumnos de la carrera de diseño de imagen y sonido de la Universidad de Buenos Aires comenzó a realizar un documental hace algunas semanas, para retratar el mundo de las carreras de galgos. 

“Decidimos investigar sobre los galgueros, pero no teníamos en cuenta que iba a ser tan polémico. Lo que se decía en las redes sociales nos incentivó a meternos en este medio para ver qué tanto había de verdad” indicó uno de los jóvenes estudiantes, oriundo de Colombia. 
Llegaron a San Pedro hace algunos meses, para grabar una de las carreras y recoger testimonios. Enterados de la prohibición y la jornada de reclamo, decidieron volver este domingo. 
“Nos interesaba no tanto lo polémico sino la tradición, porque es un lugar muy familiero, y la pasión que tienen para cuidar a los perros demanda un montón en gastos y cuidados. Vemos perros que cuidan muy bien, y yo les decía en chiste que comían mejor que yo en casa” agregó otra de las estudiantes. “Queríamos ver cómo era el trato y qué tan cierto es lo que se dice. Yo creo que malos hay en todos los lugares pero tampoco hay que creer todo lo que hay en las redes sociales” opinó.