Martilleros sampedrinos promocionan créditos hipotecarios pero desde otros sectores advierten que son buenos solo con estabilidad

La Cámara de Martilleros y Corredores Públicos de San Pedro dio a conocer un comunicado de prensa en el que compartió "algunas de las inquietudes sobre las que se propone trabajar durante los próximos meses a la espera de que se concreten algunas de las reuniones solicitadas para no demorar la exposición sobre cuestiones muy importantes para la continuidad de los proyectos privados que están en marcha". Entre otros puntos, consideran que "ante la reducción o eliminación de la obra pública, la ejecución de proyectos privados aporta no solo mayores oportunidades para quienes deseen invertir en bienes durables, sino también para activar la oferta a favor de quienes están buscando viviendas para alquilar o comprar".

Victorero: “Gracias a Dios mi hijo de 16 años cerró la puerta, porque si no, sería distinto”

Miguel Victorero
El dirigente sindical Miguel Victorero habló esta mañana, a través de APA Radio San Pedro, sobre la agresión armada contra su casa.
“Estaba mi hijo de 16 años, que gracias a Dios cerro la puerta y corrió porque si no, la noticia sería distinta” indicó, todavía conmocionado por la situación.

Victorero relató lo sucedido en la tarde del sábado: “Tocó el timbre, mi hijo preguntó quien es, no le responden. Abre la puerta y se encuentra con este muchacho con mucho olor a alcohol, que le pregunta si vive Victorero. Cuando le dice que si, saca un arma y mi hijo alcanzó a cerrar la puerta y correr, antes de que él empiece a tirar”
El titular del Sindicato de Luz y Fuerza responsabilizó a “Pablo Mastroiani, un ex empleado de la cooperativa, que es un buen muchacho, con una vida difícil” y explicó el contexto en el que tuvo lugar la agresión: “Por razones operativas en la cooperativa tuvo un cambio de sector y renunció, y gente que no mide las consecuencias le llenaron la cabeza, entonces cree que la manera de solucionarlo es esta”.
Finalmente, reflexionó que “es increíble lo nada que se valora la vida, porque una diferencia o un problema insignificante casi termina con una tragedia”.
La misma persona se dirigió luego a la casa de Felipe Garrote, presidente de COOPSER, en donde también estaba uno de sus hijos. En ese lugar se encontró una bala, según indicó Victorero. El recorrido terminó en la casa del hijo mayor del dirigente sindical, en donde se encontraba su abuela, aunque en este caso las amenazas fueron solo verbales.