Detección de glaucoma: 174 exámenes a cargo de oftalmólogos del Círculo Médico

El pasado viernes se concretó en San Pedro la jornada de adhesión a la Campaña Nacional de Detección del Glaucoma, impulsada por el Consejo Argentino de Oftalmología. En San Pedro se realizaron en tres locaciones diferentes, a cargo de los profesionales Dr. Martin Orso, Dr. Jorge Marcellac y Dr. Andrés Clemente, integrantes de la Asociación Círculo Médico de San Pedro.

Juicio a Kukato: el informe de la DEA sobre la red de venta de drogas

Un informe de la DEA (la agencia antinarcóticos de Estados Unidos) fue leído en el juicio que se sigue a una organización delictiva dedicada a la venta de drogas en el norte bonaerense y el tráfico internacional de estupefacientes. 
La investigación comenzó con el seguimiento en San Pedro a Javier “Kukato” García, y llegó hasta delincuentes colombianos radicados en nuestro país. 

 Según consigna el diario “La Capital” de Rosario, el informe de la DEA se concentra en dos de las personas acusadas ante el Tribunal Oral Federal Nº 2. 
Uno de ellos, extraditado al efecto de este proceso penal, es el ganadero colombiano de 69 años Argemiro Sierra Pastrana, quien el 29 de agosto de 1991 fue condenado en Estados Unidos a 135 meses de prisión por distribuir más de 10 kilos de cocaína, tras lo que fue deportado a Colombia el 22 de octubre de 2001. 
Sierra Pastrana está acusado como organizador de narcotráfico. Le imputan enviar desde Colombia partidas de cocaína que luego se vendían en distintas localidades de la provincia de Buenos Aires.
Otro hombre juzgado en esta causa en Rosario sobre el que informa la DEA es Marcelo Armando Biradelli. Tiene 59 años, es argentino, dueño de un bar de la ciudad de Campana y está acusado de comprar las drogas que Sierra Pastrana ingresaba a la Argentina por medio de Fernando López Echavarría, otro colombiano que también comparece.
La DEA consigna que Marcelo Biradelli tiene un recorrido histórico en el campo de las drogas. Ostenta una serie de delitos diversos en el estado de California desde 1977, como un asalto con lesiones (1º de mayo de 1980), un homicidio al conducir bajo efectos de alcohol (27 de abril de 1981) y una sentencia a 168 meses de prisión por distribuir cocaína dictada el 1º de diciembre de 1988. Por este último delito fue liberado el 25 de mayo de 2004 y deportado al día siguiente a Argentina.
Otro de los juzgados en Rosario desde hace dos semanas es Horacio Biradelli, hermano del anterior, quien también acredita en Estados Unidos conflictos por drogas. Su primer antecedente al respecto data de hace 36 años. El 5 de septiembre de 1980 fue condenado a 36 meses de prisión por conspiración para distribuir cocaína. El 28 de febrero de 1987 recibió otros 36 meses por tenencia de cocaína dentro de la cárcel con fines de venta y la misma pena un año después por idéntico delito. Fue liberado de prisión en 1993.
Los datos figuran en un informe que el Departamento de Justicia de Estados Unidos remitió al Tribunal Oral 2 de Rosario y que se leyó el miércoles pasado en la audiencia.

El origen
Este juicio comenzó hace dos semanas, a once años de la primera denuncia. Se trató de un llamado anónimo en 2005 a la comisaría de San Pedro, a 140 kilómetros al sur de Rosario, donde alguien señalaba a "Kukato" García como vendedor de drogas mediante delivery. Una brigada de la policía bonaerense lo empezó a seguir hasta descubrir, buscando a sus proveedores, una organización internacional conducida por Sierra Pastrana, a quien según la instrucción del juez federal Carlos Villafuerte Ruzo le abonaban sus envíos mediante giros de la empresa Western Union.
Por escuchas se estableció que Marcelo Biradelli le compraba estupefacientes a López Echevarría en Capital Federal para una red de vendedores minoristas. Entre estos estaban Javier "Kukato" García, Axel Manderioli, Horacio Biradelli, Cristian Serra, Matías Uriel Gómez y Juana Quispe Espinoza.
En una segunda investigación se determinó que Sierra Pastrana, que registraba vuelos regulares entre Bogotá y Buenos Aires, tenía contactos telefónicos rutinarios con Biradelli, en los que se pactaban encuentros semanales en Capital Federal, el conurbano y Campana.
El hacendado colombiano se había ido a su natal Villavicencio en diciembre de 2008 y al enterarse de que en noviembre de 2009 habían caído sus contactos no regresó. Pero Interpol lo ubicó, fue extraditado el 15 de marzo de 2013 y alojado en la cárcel de Villa Devoto. Los investigadores siguieron a Sierra Pastrana y lo fotografiaron en un bar del barrio porteño de Las Cañitas junto a Marcelo Biradelli
Parte de la cocaína que llegaba de Colombia era reenviada, según los fiscales, por Marcelo Biradelli hacia España, Australia y Holanda. Por las escuchas llegaron a Luis Avelino Esquivel, un argentino de 63 años que entraba y salía de este país de modo continuo y por lapsos breves. El 12 de diciembre de 2008 Esquivel abordó en Ezeiza un vuelo a San Pablo. Fue detenido en esa ciudad brasileña cuando embarcaba hacia España con 5,745 kilos de cocaína.
El martes pasado se leyó en la audiencia que Esquivel aceptó en la instrucción de la causa haber actuado como una mula contratado por Marcelo Biradelli cuando lo detuvieron en el aeropuerto paulista. Dijo entonces que por ese encargo Biradelli le había pagado 7 mil dólares. Con esa confesión confirmaba la investigación de los fiscales de San Nicolás que lo acusaron y complicaba a los cabecillas del grupo.

El cambio de Esquivel
Pero el miércoles Esquivel pidió ampliar su indagatoria. Tras los dos testigos policiales, dijo que iba a refutar aquel testimonio que perjudicaba a Marcelo Biradelli. Afirmó que durante la instrucción en el juzgado de Villafuerte Ruzo le dijeron que si implicaba a alguien tendría beneficios y que sería sobreseído. "La persona que me asesoró me dijo que de esa forma iba a conseguir mi libertad. Pero si yo hubiera querido implicar a Biradelli lo habría hecho en Brasil y no lo hice".
La causa tramita en Rosario porque los tribunales federales de esta ciudad son competentes por los hechos que se originaron en San Pedro. Pero ningún hecho de los que se ventilan ocurrió aquí.