El robo de una moto Brava de 110 cc de una vivienda de calle Ituzaingó al 900 dio origen a un operativo policial de búsqueda.
A los pocos minutos, los efectivos identificaron el rodado, que era conducido por un joven de 18 años con reiterados antecedentes, detenciones y polémicas decisiones de la Justicia para dejarlo en libertad.
Tras una persecución, lograron interceptarlo en calle Manuel Iglesias, en donde el conductor deja abandonado el rodado y se da a la fuga a la carrera por pasillos y patios de viviendas cercanas.
La moto fue secuestrada y restituida a su propietario.
El mismo joven sustrajo minutos después una Gillera de 110 cc en General Pueyrredón al 1100. También en este caso fue identificado en Cruz Roja y Dávila, en donde fue finalmente detenido.