El relevamiento de Defensa Civil y Desarrollo Humano esta mañana en los dos predios que fueron usurpados en la última semana, confirmó que las precarias construcciones quedaron, en la mayoría de los casos, debajo del agua.
El área que conduce Carlos García trasladó desde el terreno ubicado frente al CIC hasta las instalaciones de Rivadavia y Oliveira Cezar a una mujer embarazada con sus tres hijos.
En las manzanas ocupadas de Colón al 2.400, el panorama era distinto. Muy pocos de los ranchos y carpas instalados en los sectores delimitados por vecinos de la zona estaban ocupados. También en este caso, la mayor parte del terreno estaba inundado.
Los vecinos advirtieron sobre el riesgo eléctrico generado por un cable que se extiende sobre el terreno, dando electricidad a la mayor parte de las construcciones, y conectado sobre la calle de forma precaria.