Dos heridos graves y una casa incendiada por incidentes en Bajo Puerto

Al menos dos personas resultaron gravemente heridas durante una sucesión de confusos incidentes en la zona de Bajo Puerto.  Anoche, dos jóvenes de 20 años resultaron herido de arma de fuego y otro con un arma blanca. Ambos ingresaron por sus propios medios al Hospital Subzonal "Dr. Emilio Ruffa" en donde, tras una primera atención en quirófano, fueron derivados a terapia intensiva. 

Diversas piezas del mamífero prehistórico más grande aparecieron en Vuelta de Obligado


Un numeroso grupo de piezas óseas prehistóricas de un megaterio, el mamífero más grande de la era cuaternaria, aparecieron en Vuelta de Obligado.
Walter Marcelo Parra se detuvo a cambiar un neumático en una de las callecitas de tierra de Vuelta de Obligado.

A sólo media cuadra del asfalto que ingresa al pueblo, sobre la calle que arranca su recorrido hacia la zona del famoso “castillo de Obligado”, observó una serie de piezas de color blanco-grisáceo que llamaron su atención.
Al acercarse, se dio cuenta que había decenas de piezas y fragmentos de huesos petrificados que, en algún momento indeterminado, habían sido diseminados en el lugar al realizarse trabajos de “entoscado” sobre la calle en cuestión. 
Parra recolectó cada uno de los huesos del enorme animal fósil para entregarlos al equipo del Museo Paleontológico de San Pedro.

Un verdadero gigante
  Al ser observados y comparados los restos por el Grupo Conservacionista de Fósiles se tuvo una mejor apreciación del descubrimiento de Parra.
  Se pudieron identificar 71 piezas de diferentes partes del cuerpo de un Megaterio (Megatherium americanum), un gran animal herbívoro que llegaba a medir unos 6 metros, de la cabeza a la cola y pesar unas 5 toneladas.
  Fue el mamífero terrestre más grande del Cuaternario de la región y su nombre científico proviene del griego (mega+therium) que significa “bestia grande”.
  Su piel estaba cubierta por abundante pelaje y sus manos terminaban en poderosas garras con las cuales “enganchaba” el follaje que le servía de alimento. Dichas garras funcionaban, además, como arma de defensa ante eventuales atacantes.
  Algunos investigadores señalan al megaterio como habitante de áreas abiertas o parcialmente arboladas ubicadas en clima preferentemente  templado.
  Este gran animal, que se extinguió a finales de la Edad Lujanense, era capaz de pararse sobre sus patas traseras, ayudándose con su cola, para alcanzar los brotes más tiernos de los árboles, llegando hasta una altura superior a los 3 m.

¿Qué se recuperó?
  El conjunto de huesos fosilizados rescatados por Parra corresponden, aproximadamente, a un 30 % del esqueleto de un Megaterio adulto. En el grupo de piezas se encuentran partes de las extremidades posteriores (fémures fragmentados, etc.), partes de uno de los brazos del animal (extremo del húmero, etc.), numerosas costillas rotas, partes de la pelvis y 9 vértebras incompletas.
  Los huesos de las patas de estos animales eran muy voluminosos debido a que soportaban un gran peso corporal. Las costillas eran gruesas y fuertes para proteger los órganos vitales y los discos vertebrales eran grandes y sólidos formando una columna apropiada para semejante bestia prehistórica.
  A fines del siglo XVIII un sacerdote de Luján halló y recuperó un esqueleto muy completo de un Megaterio y solicitó ayuda al Virrey Loreto para su extracción.
  Este hecho inició de manera “oficial” la paleontología en la provincia de Bs. As. y provocó tanta admiración que el Rey Carlos III envió una carta al Virrey solicitándole que le “enviara un ejemplar vivo o en su defecto embalsamado”, sin saber que estos animales habían desaparecido hacía más de 8.000 años atrás.
  En honor al impacto del hallazgo de aquel monje en la paleontología de nuestra provincia, el Museo Paleontológico de San Pedro “Fray Manuel de Torres”, lleva su nombre.