Rafael Malacrida será ordenado sacerdote hoy en la Basílica de San Pedro del Vaticano

Once nuevos sacerdotes serán ordenados este sábado, durante la celebración eucarística que comenzará a las 18, hora del Vaticano (13 horas de Argentina) en la Basílica de San Pedro.  Entre ellos se encuentra el sampedrino Rafael Malacrida, de 31 años, formado en el Pontificio Seminario Romano Maggiore. 

Amenazas a la familia de Quintana

La familia del ex Concejal Américo Quintana, miembro del Foro de Seguridad de San Pedro, fue víctima de un episodio de amenazas que tuvo lugar en las últimas horas en su vivienda particular.
Los incidentes tuvieron lugar el sábado en la casa particular del edil, cuando su esposa fue amenazada por un grupo de jóvenes que le advirtieron que “iban a prender fuego su casa”.
“Esto es una cosa que sucede de improvisto, porque hay dos chicos del barrio e invitados que se creen los dueños del barrio, y se autodenominan Los Capitanes” explicó Quintana a través de APA Radio San Pedro. “En un primer momento lo asumí con bronca, pero son menores, y aunque parece una broma, es cierto. Lo que dijeron es que iban a prender fuego a la casa, que la iban a cagar a tiros, y que por un ventiluz se iban a meter y robar” explicó el ex concejal.
“Yo tenía que irme a asar a la Sociedad italiana que era otra de las actividades. Hablé con la policía, con el oficial a cargo, y tomé el compromiso de hablar con la madre, ayer a la mañana” dijo el forista.
Indignado por la situación, expresó que “si ellos son locos yo soy más loco que ellos, ya que en un estado ausente a todo nivel, tenemos que tomar medidas que no te gustan y poner la cara y la cabeza, si no, nunca tiene un límite nada”.
Quintana explicó el tenso diálogo con la madre de los adolescentes que amenazaron a su familia: “Le dije a la madre, con la que nos conocemos de toda la vida, que nunca tuve problemas con ningún vecino, y no voy a tener problemas con dos mocosos de mierda. Les dije “esos son”, señalándolos. Y que no iba a permitir que hicieran lo que quisieran”.
Si bien no se ha realizado una denuncia formal hasta el momento (“son menores”) Quintana considera que “las cosas las tienen que solucionar los familiares, y le dije que si ella quería que sus hijos fueran delincuentes, que no le cague la vida a la gente”.
Posteriormente, recordó que desde el Foro de Seguridad plantearon hace varios años un proyecto para establecer un centro de rehabilitación para jóvenes en conflicto con la Ley y con problemas de adicciones.